Fabrica tu propio ambientador. Recoge plantas aromáticas (tomillo, lavanda, romero...) dejalas secar y luego desmenuza hasta que quede sólo
las hojas. Usalas en los cajones, interiores de armarios ó para colgar en las puertas.
Se suele usar bolsas de tela, pero prueba a hacer
sobres de papel (no muy grueso). Yo hice varias versiones para probar y usé ramitas de lavanda que ya tenía secas. Aparte de ser decorativos dan un toque de fragancia a cualquier rincón.